En la misa de inicio de su pontificado en la basílica de San Pedro, el Papa León XIV expresó su compromiso de servir a la Iglesia y a los fieles con humildad y fidelidad, destacando la importancia de la oración, la caridad y la fidelidad a la doctrina como pilares para afrontar los desafíos actuales, e invitando a renovar el compromiso con Cristo en un momento de pruebas para la comunidad católica.
En la misa de inicio de su pontificado, el Papa León XIV pronunció una homilía en la que expresó su compromiso de servir a la Iglesia y a los fieles con humildad y fidelidad. La ceremonia tuvo lugar en la basílica de San Pedro, donde congregó a numerosos miembros de la jerarquía eclesiástica y representantes de diversas naciones. La homilía fue transmitida en directo y generó gran expectativa entre los católicos de todo el mundo.
El Papa León XIV destacó en su discurso la importancia de la oración, la caridad y la fidelidad a la doctrina, como pilares fundamentales para afrontar los desafíos actuales de la Iglesia. Asimismo, invitó a los presentes a renovar su compromiso con Cristo y a vivir con coherencia la fe en sus vidas diarias, en un momento en que la comunidad católica enfrenta múltiples pruebas.
El pontífice subrayó que su misión será promover la paz, la justicia y la misericordia, en consonancia con la enseñanza del Magisterio y siguiendo el ejemplo de San Pedro. La homilía concluyó con una oración por la unidad de los cristianos y por la protección divina sobre su ministerio, en un acto que simboliza la continuidad de la misión de la Iglesia en el mundo contemporáneo.
Tras la ceremonia, se difundieron imágenes y declaraciones que reflejaron la solemnidad y esperanza que inspiró la celebración en la Ciudad del Vaticano. La homilía del Papa León XIV marca el inicio de un pontificado dedicado a fortalecer la fe y la presencia de la Iglesia en la sociedad, en línea con los principios del Magisterio y la tradición católica.
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