El Vaticano propone medidas reparadoras y una mayor transparencia frente a los abusos en la Iglesia
La Comisión Pontificia para la Tutela de los Menores ha presentado su segundo informe, que propone medidas reparadoras contra los abusos dentro de la Iglesia Católica.
El documento, elaborado por la Pontificia Comisión para la Tutela de los Menores, ofrece un vademécum con directrices para un "escucha informado" y apoyo económico, psicológico y espiritual a las víctimas de abusos. Se destaca la necesidad de una comunicación más transparente, la asunción pública de responsabilidades por parte de la Iglesia y la simplificación de los mecanismos de denuncia.
El informe, definido como un "peregrinaje perpetuo" por el arzobispo Thibault Verny, presidente de la Comisión, fue publicado el 16 de octubre. Este documento se basa en el testimonio directo de víctimas y en la consulta con organizaciones no eclesiales, subrayando la urgencia de una Iglesia más receptiva y la falta de estructuras claras para la denuncia.
Ayúdanos a mantener vivo este proyecto: DONALas medidas reparadoras propuestas incluyen la creación de "espacios seguros" para que las víctimas puedan compartir sus experiencias directamente con las autoridades eclesiásticas. El concepto de "reparación" se aborda como una responsabilidad compartida por toda la comunidad, con excepción de las víctimas, para fomentar un ambiente de cuidado y respeto mutuo.
El informe también aboga por un apoyo integral a las víctimas, que incluye asesoramiento profesional y acompañamiento espiritual, así como asistencia financiera para cubrir los gastos derivados de los abusos. Se enfatiza la importancia de sancionar a quienes hayan cometido o facilitado abusos, asegurando que las víctimas no queden en la incertidumbre respecto a la responsabilidad de los autores.
Además, se subraya la necesidad de acceso a la información sobre los casos individuales como un elemento esencial en el proceso de sanación. Se proponen programas de sensibilización dirigidos al clero, religiosos y laicos para promover un proceso de sanación colectiva.
El documento también recomienda desarrollar procedimientos simplificados para la remoción de líderes eclesiásticos involucrados en acciones o inacciones administrativas que hayan causado daño adicional a las víctimas. Se sugiere la creación de una "red académica internacional" que involucre centros universitarios católicos especializados en derechos humanos, prevención de abusos y tutela.
Finalmente, el informe examina la actividad de tutela en diversas iglesias locales alrededor del mundo, destacando tanto los avances como los desafíos persistentes en la implementación de políticas de protección. Se reconoce el trabajo de la Conferencia Episcopal Italiana en la creación de un sistema de coordinación y formación para apoyar a las iglesias locales.
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