El Papa León XIV habla a los Obispos sobre celibato y castidad

Durante un encuentro en la basílica vaticana, el Papa León XIV llamó a los obispos a ser ejemplos de unidad y comunión, subrayando la importancia del diálogo y la oración en su misión pastoral.

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El Papa León XIV se reunió hoy en la basílica vaticana con los obispos que han llegado a Roma para participar en su Jubileo. Durante este encuentro, el Pontífice les exhortó a ser siempre hombres de comunión y unida En su intervención, el Papa Prevost destacó la importancia de ir contracorriente para anunciar el Evangelio en un mundo que a menudo se muestra indiferente o incluso hostil hacia los valores cristianos.

En su alocución, el Papa subrayó que la misión de los obispos es esencial para mantener la cohesión dentro de la Iglesia. Les recordó que deben ser ejemplos vivos de unidad y comunión, no solo entre ellos mismos, sino también con sus fieles. Además, el Sumo Pontífice enfatizó la necesidad de estar siempre abiertos al diálogo y a la escucha, promoviendo un ambiente de confianza y colaboración mutua.

León XIV también hizo hincapié en la importancia de la oración y el discernimiento espiritual como herramientas fundamentales para guiar a sus comunidades. Según el Papa, estos elementos son cruciales para enfrentar los desafíos actuales y futuros que se presentan ante la Iglesia. Asimismo, animó a los obispos a no temer las dificultades, sino a verlas como oportunidades para fortalecer su fe y compromiso pastoral.

Como apunte a destacar del mensaje del Santo Padre, insistió en la importancia de vivir la virtud de la castidad que en el caso de los obispos y sacerdotes se concreta en el celibato. "Junto con la pobreza efectiva, el Obispo también vive esa otra forma de pobreza que es el celibato y la virginidad por el Reino de los Cielos (cf. Mt 19,12). No se trata sólo de ser célibe, sino de practicar la castidad del corazón y de la conducta y, de este modo, vivir el seguimiento de Cristo, para poder manifestar a todos la verdadera imagen de la Iglesia, que es santa y casta en sus miembros como en su Cabeza. Además, deberá ser firme y decidido al afrontar las situaciones que puedan provocar escándalo, así como cualquier caso de abuso, especialmente contra menores, ateniéndose a las disposiciones vigentes", dijo el Pontífice a los Obispos.

Por último, el Papa León XIV concluyó su mensaje recordando a los obispos que su labor no es solo administrativa o jerárquica, sino profundamente pastoral. Les pidió que sean pastores cercanos a sus fieles, capaces de escuchar sus necesidades y preocupaciones. El Pontífice insistió en que solo mediante una auténtica cercanía podrán guiar eficazmente a sus comunidades hacia una vivencia plena del Evangelio.