El impuesto Arnona amenaza la estabilidad de las iglesias en Jerusalén

Los obispos de Tierra Santa y el nuncio apostólico se reúnen para abordar la inminente aplicación del impuesto sobre la propiedad en Jerusalén.

En una reunión reciente de la Asamblea de Ordinarios Católicos de Tierra Santa, se discutió la problemática del impuesto municipal sobre la propiedad, conocido como Arnona, que amenaza con afectar gravemente a las instituciones eclesiásticas en Jerusalén. Tradicionalmente, las iglesias han estado exentas de este impuesto, pero las autoridades gubernamentales han manifestado su intención de hacerlo cumplir.

El arzobispo Adolfo Tito Yllana, nuncio apostólico en Israel y delegado apostólico en Jerusalén y Palestina, participó en este encuentro. Durante la reunión, el Cardenal Pierbattista Pizzaballa, OFM, destacó la gravedad de la situación actual para las instituciones católicas. Según un comunicado del Patriarcado Latino de Jerusalén, "Su Beatitud subrayó que el statu quo respecto al impuesto Arnona ha llegado a su fin y que el cambio es inevitable".

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El director ejecutivo del Patriarcado Latino de Jerusalén ya había advertido a principios de año que "todas las iglesias irán a la bancarrota si tenemos que pagar según la ley". Esta situación plantea un desafío significativo para las comunidades religiosas en la región, que ahora enfrentan la posibilidad de tener que ajustar sus presupuestos para cumplir con las nuevas exigencias fiscales.