El Papa León XIV ha recibido este jueves en audiencia al equipo del Tribunal de la Rota de la Nunciatura Apostólica, órgano eclesiástico de apelación y, en casos determinados, de primera instancia para causas civiles y canónicas en España. El encuentro, de carácter informal, ha contado con la participación de todos los trabajadores del tribunal y sus familias, encabezados por su decano, el sacerdote Carlos Morán.
Durante la visita, el Pontífice expresó su aprecio por la labor diaria del tribunal y se interesó personalmente por las tareas que desempeñan sus miembros. El Papa quiso así respaldar el compromiso y la entrega de los jueces, oficiales y personal auxiliar de esta institución clave en la administración de justicia de la Iglesia en España.
Carlos Morán, actual decano, ha explicado en anteriores ocasiones que la Rota Española “es algo similar a la Audiencia Nacional, que se creó en España para resolver delitos determinados como el de terrorismo, liberar de la responsabilidad a los tribunales ordinarios y garantizar su independencia”. Según sus palabras, la Rota “desempeña esa función de tribunal nacional penal de facto”, con el fin de “atender mejor a las víctimas en los casos de abusos” y asegurar que las penas eclesiásticas “cumplan siempre las finalidades de la pena: restablecer la justicia, reparar el daño y el escándalo producido, y enmendar al reo”.
El Tribunal de la Rota de la Nunciatura Apostólica en España, también conocido como Rota Española o Rota Matritense, tiene su sede en la calle del Nuncio, en Madrid. Ejerce como instancia de apelación y, excepcionalmente, como primera instancia. Su estructura se inspira en la Rota Romana, de la que depende jerárquicamente y con la que mantiene una relación directa de complementariedad.
Esta institución tiene una historia centenaria en España. Fue el papa Clemente XIV quien en 1771 otorgó al tribunal del Nuncio Apostólico una organización estable y colegiada. Tras diversas interrupciones en el siglo XIX, Pío XI lo suprimió en 1932 durante la Segunda República. Posteriormente, en 1947, Pío XII lo restableció mediante el motu proprio Apostolico Hispaniarum Nuntio, devolviéndole sus competencias. Desde 1999 se rige por las Normas orgánicas y procesales promulgadas por San Juan Pablo II, adaptadas al Derecho Canónico vigente y a los acuerdos firmados entre España y la Santa Sede en 1979.
En el plano funcional, la Rota conoce en segunda instancia las causas juzgadas por tribunales diocesanos o metropolitanos; actúa en tercera o ulterior instancia cuando procede; y puede asumir procesos en primera instancia si lo dispone el Nuncio por causas graves. Sus competencias abarcan principalmente los procesos de nulidad matrimonial, pero también causas penales y litigios eclesiásticos diversos. Bajo su competencia queda también el tribunal del Arzobispado Castrense.
Su composición refleja la naturaleza colegiada del tribunal. Está presidido por el Nuncio Apostólico, actualmente monseñor Piero Pioppo. Cuenta con un decano —el sacerdote Carlos Morán Bustos—, siete jueces auditores, un Fiscal-Promotor de Justicia, un Defensor del Vínculo, cancilleres-notarios y personal auxiliar. Todos los jueces han de ser sacerdotes con formación superior en Derecho Canónico y cesan en sus funciones al cumplir setenta y cinco años. Los gastos del tribunal corren a cargo de la Conferencia Episcopal Española; mientras que el Nuncio regula aranceles y expensas mediante decretos específicos, previendo también asistencia gratuita a quienes no puedan sufragar los costes.
Además de su misión jurisdiccional, la Rota Española desempeña una labor formativa relevante. A través del Estudio Rotal, promueve la capacitación de abogados y procuradores en derecho matrimonial canónico, habilitándolos para actuar ante los tribunales eclesiásticos de toda España. Esta función se ha hecho aún más necesaria tras las reformas impulsadas por el Papa Francisco en 2015 que han agilizado el tratamiento de las causas de nulidad.
En los últimos años, el trabajo del tribunal se ha diversificado notablemente. Más allá de las nulidades matrimoniales, ha intervenido en casos relacionados con abuso de poder, conciencia y sexuales dentro del ámbito eclesial.