El cardenal Isao Kikuchi, arzobispo de Tokio, ha manifestado su firme oposición al plan de Aska Pharmaceutical de vender la píldora del día después sin receta en Japón, subrayando la necesidad de una educación moral adecuada.
El anuncio realizado por la empresa Aska Pharmaceutical el 20 de octubre de 2025 representa un cambio de política significativo, ya que por primera vez en Japón se permitirá la compra de la píldora del día después sin necesidad de receta médica, aunque su consumo deberá ser supervisado por un farmacéutico capacitado. El cardenal Isao Kikuchi, en declaraciones a UCA News, expresó que "no puede aprobar medidas que puedan tomar la vida humana sin una educación moral adecuada".
El prelado añadió que, si bien comprende que esta medida se presenta como un avance en el respeto y promoción del "derecho de autodeterminación de la mujer", es esencial reconocer que "la vida es un don de Dios". Sus declaraciones destacan la preocupación de la Iglesia por que, incluso en el contexto de la salud reproductiva, la formación moral debe preceder a cualquier cambio regulatorio.
La píldora en cuestión está destinada a prevenir embarazos no deseados si se toma dentro de las 72 horas posteriores al coito. El fabricante ha subrayado que su disponibilidad sin receta ayudaría a alinear a Japón con las prácticas de muchos países occidentales y ampliaría el acceso para las mujeres. Aunque la empresa aún no ha especificado una fecha de venta, ha enfatizado que las mujeres de cualquier edad podrán adquirir el producto bajo el nuevo régimen.
Las discusiones iniciales sobre el acceso sin receta se remontan a 2017, y una consulta pública mostró un fuerte apoyo, citando los derechos de las mujeres, las barreras para acceder a clínicas y el retraso de Japón respecto a otras naciones en actitud regulatoria. Asociaciones médicas como la Sociedad Japonesa de Obstetricia y Ginecología y la Asociación Japonesa de Obstetras y Ginecólogos han expresado reservas, señalando marcos insuficientes de educación sexual y una formación inadecuada de los farmacéuticos.
Un programa piloto en 2023 probó modelos de cambio a venta libre, allanando el camino para la aprobación regulatoria completa por parte del Consejo de Asuntos Farmacéuticos de Japón en mayo de 2025. Desde la perspectiva de la enseñanza católica, el asunto toca cuestiones fundamentales sobre la dignidad de la vida humana. La Conferencia Episcopal había rechazado anteriormente la aprobación del Norlevo para su fabricación y comercialización farmacéutica. Los obispos afirmaron en una declaración de diciembre de 2010 que los anticonceptivos de emergencia están destinados a provocar abortos deliberados. El aborto artificial contradice el deber moral de respetar la vida humana. Dado que los anticonceptivos pueden impedir la implantación del óvulo fecundado, son, en efecto, abortivos.
A medida que avanza la implementación de esta política, se centrará ahora en cómo se despliegan los marcos educativos y si las preocupaciones eclesiales sobre formación moral son consideradas junto con esta liberalización del acceso farmacéutico.
