El Papa León XIV agradece a los gendarmes en la misa por San Miguel Arcángel
El Pontífice presidió la celebración en los Jardines Vaticanos, destacando la vocación de servicio de los gendarmes y su papel esencial en la seguridad del Vaticano.
El Papa León XIV presidió una misa en la Gruta de Lourdes de los Jardines Vaticanos el 5 de octubre, con motivo de la fiesta de San Miguel Arcángel, patrono del Cuerpo de Gendarmería del Vaticano. Durante la homilía, el Papa agradeció a los gendarmes por su servicio y los exhortó a ser "testigos de la paz" en el corazón de la Iglesia universal. Subrayó que su labor es una vocación de servicio, no solo una profesión, y destacó la importancia de su presencia discreta y tranquilizadora.
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El Pontífice reflexionó sobre las palabras de San Pablo a Timoteo, recordando que su misión no es para dominar, sino para servir con caridad y responsabilidad. También dirigió palabras a los nuevos reclutas, enfatizando que su juramento es un acto de libertad y entrega ante Dios y la Iglesia. El Papa reconoció que, aunque su labor es poco visible, es esencial para la seguridad y el orden en el Vaticano, reflejando la misión de la Iglesia.
El Santo Padre destacó la dimensión espiritual de su vocación, animándolos a ser testigos de la paz más allá de las fronteras del Vaticano. Les pidió vivir su misión con humanidad, apoyándose en la fe y la gracia del Espíritu Santo. Además, extendió su gratitud a las familias de los gendarmes por su apoyo silencioso. Al concluir, encomendó al Cuerpo de Gendarmería a la protección de la Virgen María y San Miguel Arcángel, pidiendo que continúen su misión con valor y fe.
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