Rosalía despierta el interés religioso entre los jóvenes con su nuevo álbum “Lux”

La cantante Rosalía ha revelado el contenido y la estética de su próximo disco “Lux” rodeada de un simbolismo profundamente cristiano, suscitando interrogantes sobre una posible revalorización espiritual entre los jóvenes españoles. El auge de signos religiosos en la cultura pop parece responder al vacío existencial que deja una sociedad saturada de ruido, inmediatez y precariedad.

La artista catalana, en una aparición que recuerda a las representaciones clásicas de santas y novicias, desveló el pasado 16 de octubre en la plaza de Callao de Madrid la portada de su cuarto álbum de estudio. En ella aparece vestida de blanco, con velo, un anillo con cruz y una luz dorada que evoca la iconografía de la Anunciación. Acompañada de una campaña visual marcada por el simbolismo cristiano, la imagen fue recibida por una multitud que la rodeaba con devoción casi litúrgica.

En recientes declaraciones, Rosalía ha afirmado que “Dios es el único que puede llenar los espacios si tú tienes la predisposición”. La cantante confesó sentirse atraída por la vida de clausura y definió a las monjas como “ciudadanas celestiales”. Este tipo de afirmaciones no son nuevas en su trayectoria: ya en anteriores obras, como *El Mal Querer* o *Motomami*, se habían percibido guiños a la fe, aunque nunca tan explícitos como en “Lux”.

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Esta vuelta a lo sagrado no se circunscribe a una figura individual. El uso creciente de símbolos cristianos en la música y el arte joven parece insinuar un cambio cultural más profundo. Según datos recientes del CIS, el porcentaje de jóvenes de entre 18 y 34 años que se declaran católicos ha aumentado desde 2021. El periódico The Times ha relacionado este fenómeno con la llamada “fatiga pospandémica”, interpretando que los jóvenes buscan sentido “más allá del consumismo”.

Artistas como Hakuna, Siloé o incluso fenómenos efímeros como el de Íñigo Quintero, apuntan en la misma dirección: una sensibilidad religiosa renovada, aún indefinida pero presente, que emerge entre melodías y versos de estética sacra. La misma industria, antes reacia a mostrar referencias de fe, parece ahora interesada en redescubrir su potencial simbólico y comunitario.

Rosalía, con su disco “Lux”, no solo revitaliza el lenguaje visual del cristianismo en la esfera pública, sino que lo hace con una carga existencial explícita. “Yo tengo un deseo que sé que este mundo no puede satisfacer”, declaró, aludiendo a ese anhelo de plenitud que sólo puede colmar la presencia divina. La clave, quizá, esté en que este retorno no se quede en estética, sino que se transforme en oración y vida sacramental.

En un contexto de secularización acelerada, la esperanza es que este despertar no sea mera estrategia comercial ni expresión vacía de una moda. Queda por ver si lo que hoy emociona en el escenario se traducirá en conversiones silenciosas, vocaciones religiosas y almas que, tocadas por la gracia, retornen al misterio de Dios.

El próximo 7 de noviembre, Rosalía presentará por primera vez en directo “Lux” durante la gala de los Los40 Music Awards Santander 2025, que tendrá lugar en el Roig Arena de Valencia. El espectáculo, diseñado especialmente para la ocasión, marcará el inicio oficial de esta nueva etapa. Ese mismo día se publicará el álbum completo.