El Papa León XIV afirmó que la evangelización en América no eliminó las culturas preexistentes, sino que las transformó, en un mensaje dirigido al XVII Congreso Nacional Misionero en México.
El Papa León XIV expresó que la llegada del Evangelio al continente americano no supuso la desaparición de las culturas autóctonas, sino su transformación. Este mensaje fue enviado a los participantes del XVII Congreso Nacional Misionero, que se inauguró este viernes en Puebla de los Ángeles, México. El Santo Padre, de origen estadounidense y con pasaporte peruano, subrayó que "el Evangelio no borró lo que encontró, sino que lo transformó".
En su intervención, León XIV destacó la riqueza cultural de los pueblos indígenas, afirmando que sus lenguas, símbolos, costumbres y esperanzas fueron integrados con la fe cristiana, permitiendo que el Evangelio echara raíces y floreciera en obras de santidad y belleza únicas. Asimismo, resaltó que la aparición de la Virgen de Guadalupe representó un signo de perfecta inculturación y un impulso misionero para la Iglesia.
El Papa también mencionó la figura del beato Juan de Palafox y Mendoza, quien fue un destacado pastor y misionero en Puebla. Según el Pontífice, Palafox enseñó que "el verdadero misionero no domina, sino que ama; no impone, sino que sirve", y que la fe no debe ser instrumentalizada para obtener ventajas personales, materiales, de poder o de prestigio.
En su mensaje, León XIV animó a los misioneros a enfrentar las divisiones sociales, los desafíos tecnológicos y los deseos de paz, siendo "las manos de la Iglesia que coloquen la levadura del Resucitado en la masa de la historia, para que vuelva a fermentar la esperanza". Concluyó afirmando que "hay que estar dispuestos a poner las manos en la masa del mundo", subrayando la importancia de involucrarse activamente en la transformación social.
