La Iglesia en Panamá respalda ley contra el hambre y el desperdicio alimentario

La iglesia católica en Panamá respalda una nueva ley que busca combatir el hambre y reducir el desperdicio alimentario mediante la redistribución de excedentes a personas vulnerables, promoviendo la solidaridad y responsabilidad social.

La Iglesia católica en Panamá ha manifestado su respaldo a una nueva legislación destinada a combatir el hambre y reducir el desperdicio de alimentos en El País. Esta iniciativa busca establecer un marco legal que permita la redistribución de alimentos excedentes a personas en situación de vulnerabilidad. Monseñor José Domingo Ulloa, arzobispo de Panamá, ha expresado su apoyo a esta medida, destacando la importancia de actuar con solidaridad y responsabilidad social.

Durante una reciente alocución, Monseñor Ulloa subrayó que la ley no solo aborda un problema social urgente, sino que también promueve valores cristianos fundamentales como la caridad y el cuidado del prójimo. En sus palabras, "es necesario que todos los sectores de la sociedad se unan para erradicar el hambre y asegurar que los recursos sean utilizados de manera eficiente".

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El proyecto de ley contempla la creación de bancos de alimentos y establece incentivos para las empresas que participen en la donación de productos alimenticios. Además, se prevé la implementación de campañas educativas para concienciar a la población sobre la importancia de evitar el desperdicio. La Iglesia panameña ha enfatizado su disposición a colaborar activamente en estas iniciativas.

Por otra parte, Monseñor Ulloa ha llamado a las autoridades gubernamentales y al sector privado a trabajar conjuntamente para garantizar el éxito de esta legislación. Ha señalado que "la lucha contra el hambre es una responsabilidad compartida que requiere el compromiso y esfuerzo conjunto de todos". La Iglesia se compromete a seguir apoyando acciones que contribuyan al bienestar social y al desarrollo humano integral.

Se espera que esta ley sea discutida en las próximas sesiones del parlamento panameño. La Iglesia católica continuará vigilante ante los avances legislativos y reitera su compromiso con las causas sociales que promuevan la dignidad humana y el bien común.