La Universidad de Scranton, dirigida por jesuitas, ha contratado al exsenador estadounidense Bob Casey Jr., conocido por sus posturas pro-aborto y pro-LGBT, como "Distinguished Fellow in Public Service".
La Universidad de Scranton, una institución dirigida por jesuitas, ha anunciado la contratación del exsenador estadounidense Bob Casey Jr. como "Distinguished Fellow in Public Service". Esta decisión ha generado controversia debido a las conocidas posturas de Casey a favor del aborto y los derechos LGBT, lo que ha suscitado críticas sobre la coherencia de la universidad con los principios católicos.
El presidente de la universidad, Joseph G. Marina, S.J., ha defendido la elección de Casey, afirmando que es "perfecto" para el papel de formar a hombres y mujeres como agentes de cambio social. Sin embargo, críticos como Francis P. Sempa, graduado de la universidad en 1981, han cuestionado esta decisión, señalando la evolución de Casey de un político pro-vida a uno pro-aborto, en contraste con la postura de su padre, quien se opuso firmemente al aborto.
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Durante su carrera en el Senado, Casey ha mostrado un historial mixto en temas de aborto. Aunque votó a favor del Acta de Protección de Sobrevivientes de Aborto Nacidos Vivos en 2019, también ha apoyado el financiamiento de Planned Parenthood con fondos públicos. Además, ha sido un defensor constante de los derechos LGBT, habiendo sido copatrocinador de la "Ley de Respeto por el Matrimonio", que legalizó el matrimonio entre personas del mismo sexo a nivel federal.
La contratación de Casey ha generado preguntas sobre el mensaje que la universidad está enviando a sus estudiantes y a la comunidad católica de Scranton. Sempa se pregunta qué tipo de educación "católica" están proporcionando los jesuitas a sus estudiantes, dado que la contratación de un político con posturas contrarias a la doctrina católica podría ser vista como una contradicción.
