Dos reliquias de primer grado de San Juan Pablo II llegan a la Diócesis de Córdoba

La Diócesis de Córdoba ha recibido con alegría dos reliquias de primer grado de San Juan Pablo II, entregadas personalmente por el Cardenal Stanisław Dziwisz, secretario personal del santo polaco durante más de cuatro décadas.

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Las reliquias han sido recibidas por el sacerdote Fernando Luján, párroco de Santa Marina de Aguas Santas de Villafranca de Córdoba, en el marco de una peregrinación a Polonia que tuvo lugar del 20 al 30 de junio.

El grupo de peregrinos, formado por 35 feligreses de la parroquia, visitó los lugares más significativos en la vida de Karol Wojtyła, como Wadowice —su localidad natal—, Cracovia, Częstochowa y Varsovia. Uno de los momentos más emotivos fue el encuentro privado entre el párroco Fernando Luján y el Cardenal Dziwisz en Cracovia, donde este le entregó las preciadas reliquias: una destinada a la parroquia de Villafranca y otra a la parroquia de San Juan Pablo II de Córdoba capital.

El sacerdote cordobés llevó consigo una carta del obispo de Córdoba, monseñor Jesús Fernández, dirigida al arzobispado de Cracovia, solicitando formalmente la concesión de estas reliquias. El Cardenal Dziwisz, a quien Luján definió como una “reliquia viva” por su estrecha relación con el Papa polaco, se mostró —según relató el sacerdote— “atento, hospitalario y cercano” durante un encuentro de casi una hora que calificó como “gozoso”.

Este importante acontecimiento fortalece aún más el vínculo espiritual entre la Diócesis de Córdoba y la figura de San Juan Pablo II, cuya vida y legado siguen inspirando a los fieles de todo el mundo.