 
	El arzobispo de Kinshasa, Fridolin Ambongo Besungu, ha pedido medidas urgentes para abordar la crisis humanitaria en el Congo, destacando el saqueo de recursos y la importancia del diálogo interreligioso.
El cardenal Fridolin Ambongo Besungu, arzobispo de Kinshasa, ha denunciado el silencio internacional frente a la crisis humanitaria que asola la República Democrática del Congo. Durante su intervención en el Encuentro Internacional "Atrévete a la Paz", organizado por la Comunidad de Sant'Egidio en Roma, el cardenal subrayó la necesidad de medidas urgentes para enfrentar las consecuencias de décadas de conflicto, que han dejado millones de muertos y desplazados. Según Ambongo, el saqueo sistemático de los recursos del país continúa mientras se ignora la dignidad humana.
El cardenal Ambongo también destacó la importancia del diálogo interreligioso en el Congo, donde existe una comunicación consolidada entre católicos y protestantes, pero no con las nuevas iglesias evangélicas, muchas de las cuales están vinculadas a intereses políticos. En su opinión, es necesaria una verdadera conversión de los líderes religiosos antes de abordar la conversión de los políticos. La situación humanitaria en el país es crítica, especialmente en la zona oriental, donde la proliferación de grupos armados y la injerencia de países vecinos han agravado la crisis.
La participación de los países vecinos es esencial para lograr la paz en el Congo, según el arzobispo de Kinshasa. El conflicto tiene dimensiones internas y externas, con intereses de naciones como Ruanda, Burundi y Uganda en los recursos minerales del país. Además, la injusticia social interna, con la riqueza concentrada en una minoría, agrava la situación. En este contexto, la Iglesia Católica sigue siendo un pilar de esperanza para el pueblo congoleño, promoviendo iniciativas como el "Pacto Social por la Paz en la República Democrática del Congo y la Convivencia Armoniosa en la Región de los Grandes Lagos".
