La presión de los feligreses doblega al obispo de Palencia y frena el traslado del párroco de Carrión

La presión de los feligreses doblega al obispo de Palencia y frena el traslado del párroco de Carrión

El obispo de Palencia, Mikel Garciandía, ha dado marcha atrás en su decisión de trasladar al párroco Ricardo Fernández, tras las intensas protestas protagonizadas por feligreses y vecinos de Carrión de los Condes.

Según informó Diario Palentino, la presión vecinal —que incluyó pancartas, mensajes en redes sociales y una tensa reunión en la sacristía de la iglesia de Santa María del Camino— ha sido determinante para revertir el traslado. Como se puede apreciar en la fotografía de portada, incluso varios niños participaron en primera línea en la protesta en el interior de la iglesia contra el traslado del párroco.

El sacerdote, conocido afectuosamente como "don Ricardo", es uno de los tres responsables pastorales que atienden una veintena de pueblos en la Unidad Pastoral de Carrión. La posible reubicación había generado una fuerte oposición entre la comunidad, que se movilizó visiblemente durante la visita del obispo el pasado lunes. Las pancartas exhibían mensajes como «¡No traslade a Ricardo!», «Pedimos que se quede» o «D. Ricardo, eres el mejor. Quédate con nosotros».

En un giro inesperado, el obispo convocó este domingo al equipo de animación pastoral en la Casa de la Iglesia de Palencia y les comunicó que ha reconsiderado su decisión. En consecuencia, Ricardo Fernández continuará en su actual destino.

El equipo pastoral expresó su satisfacción en un comunicado difundido por redes sociales, donde valoró positivamente que el obispo haya demostrado «capacidad de reevaluar con inteligencia, madurez y visión de futuro». También agradecieron el consenso alcanzado, en línea con el espíritu de diálogo que promueve el Papa León XIV: «Queremos una Iglesia sinodal, que camina, que busca la paz. Debemos construir puentes con el diálogo, con el encuentro».

Desde la Diócesis, tal como recogió Diario Palentino, se puntualizó que no se había emitido aún ningún decreto oficial de nombramiento y que este tipo de cambios pastorales suelen afectar a varias unidades y no a una sola en particular.

Durante los días de incertidumbre, don Ricardo optó por el silencio público, aunque recibió el respaldo explícito del alcalde de Carrión, Luis Miguel Medina. Finalmente, el peso del apoyo popular ha inclinado la balanza y el sacerdote continuará sirviendo a su comunidad.

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