El Observador del Vaticano en la ONU promueve salud y educación centradas en la persona

El Observador del Vaticano en la ONU promueve salud y educación centradas en la persona

El Observador permanente de la Santa Sede ante la ONU, Gabriele Caccia, ha destacado en el Foro Político de Alto Nivel la necesidad de políticas de salud y educación que prioricen el bienestar y la dignidad humana.

El Observador permanente de la Santa Sede ante la ONU en Nueva York, Gabriele Caccia, intervino en dos ocasiones durante el Foro Político de Alto Nivel sobre Desarrollo Sostenible. En sus intervenciones, subrayó la importancia de centrar las políticas de salud y educación en la persona, evitando influencias ideológicas. Caccia destacó que estas áreas deben priorizar el bienestar integral del individuo, promoviendo un enfoque que respete la dignidad humana.

En su primera intervención, Caccia enfatizó que la salud no debe ser instrumentalizada por intereses ideológicos o económicos. Según sus palabras, "la salud es un derecho fundamental que debe ser accesible para todos, sin discriminación". Además, hizo hincapié en la necesidad de fortalecer los sistemas sanitarios para garantizar una atención adecuada y equitativa a todas las personas.

Durante su segunda intervención, el Observador permanente abordó el tema de la educación. Señaló que esta debe ser inclusiva y centrada en el desarrollo integral del ser humano. "La educación no puede ser un vehículo para imponer ideologías", afirmó Caccia. Asimismo, destacó la importancia de fomentar una educación que promueva valores universales y prepare a los jóvenes para enfrentar los desafíos del mundo actual.

Mons. Caccia también hizo referencia a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), subrayando que estos deben ser implementados con un enfoque centrado en la persona. En este sentido, animó a los Estados miembros a trabajar juntos para lograr un desarrollo verdaderamente sostenible que respete y promueva la dignidad humana en todas sus dimensiones.

El representante del Vaticano reiteró el compromiso de la Santa Sede con el diálogo y la cooperación internacional para alcanzar estos objetivos. Subrayó que solo a través de un esfuerzo conjunto se podrá construir un futuro más justo y equitativo para todos.

Comentarios
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David Barragán
2 meses hace
La Iglesia insiste en que salud y educación deben respetar la dignidad humana, sin agendas ideológicas. La verdadera ayuda está en poner al ser humano en el centro, no en manipularlo con intereses políticos.
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Valeria Cruz
3 meses hace
Hablar de salud y educación centradas en la persona suena bien, pero sin un enfoque claro y sin cuestionar intereses políticos, queda en palabras vacías. La dignidad humana no se defiende solo con discursos, sino con acciones concretas y valores firmes.
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Arnau Parra
3 meses hace
La Iglesia siempre ha defendido la dignidad humana, y aquí Caccia reafirma esa postura en la ONU: salud y educación deben centrarse en la persona, no en ideologías. Un recordatorio de que el humanismo cristiano sigue siendo vital en el desarrollo global.
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Manuel Santos
3 meses hace
Proponen salud y educación que respeten la dignidad humana, sin influencias ideológicas. La verdadera misión de la Iglesia sigue siendo cuidar del alma y promover valores eternos en un mundo cada vez más materialista.
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