El Papa León XIV advierte contra una formación religiosa reducida a un conjunto de reglas, subrayando la importancia del amor y la vida interior en el camino espiritual.
En un discurso dirigido a los participantes del capítulo general del Orden de San Agustín el 15 de septiembre de 2025, el Papa León XIV enfatizó que la formación religiosa no debe ser vista como "un conjunto de reglas a observar". Desde el Augustinianum, un complejo universitario cercano al Vaticano, donde permaneció durante cinco horas y compartió un almuerzo con su familia religiosa, el Santo Padre animó a cultivar la vida interior. Muy cercano a su orden religiosa, León XIV ya había inaugurado las sesiones de la asamblea de los agustinos, que cuenta con la participación de un centenar de miembros, el pasado 1 de septiembre. "Ser reconocido como un agustino es un honor que se guarda con aprecio. [...] Gran parte de lo que soy se lo debo al espíritu y a las enseñanzas de San Agustín", confesó el pontífice en un mensaje de vídeo el 28 de agosto. Nuevamente, este lunes, el pontífice expresó su alegría por estar presente: "Puedo decir que me siento en casa y que participo interiormente, también yo, en espíritu de compartir espiritual, en lo que ustedes viven estos días", aseguró al inicio del encuentro, quien fue durante 12 años prior general de su orden (2001-2013).
En su discurso, León XIV insistió en la importancia de la "interioridad", citando a San Agustín, el obispo del siglo IV que inspiró su orden: "No te alejes de ti mismo, regresa a ti mismo: la verdad habita en el hombre interior". Explicó que uno vuelve a sí mismo para luego salir a la misión con mayor motivación y entusiasmo. Al abordar la formación de los jóvenes religiosos, el Papa advirtió sobre "el error de concebir la formación religiosa como un conjunto de reglas a observar o cosas a hacer, o como un hábito ya listo para vestir pasivamente". En el centro de todo, insistió, "está el amor, [...] la atracción de algo grande, de un amor capaz de nutrir y saciar el corazón".
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Desde la sede del Instituto Patrístico Augustinianum, un establecimiento de teología especializado en los Padres de la Iglesia, estos pensadores de los primeros siglos del cristianismo, León XIV también se dirigió a los académicos. Les invitó a cultivar "la humildad, para no caer en la vanidad de quienes buscan la ciencia por sí misma, sintiéndose superiores a los demás por poseerla". "Nunca es posible llegar a [Dios] únicamente por nuestra razón o por una serie de informaciones teóricas", advirtió el líder de la Iglesia Católica. Y animó a que durante los estudios se dejen maravillar por su grandeza [...] y sobre todo a amarlo y hacer que sea amado.
El Papa también llamó a sus hermanos a ser "fieles a la pobreza evangélica", citando su Regla religiosa: "Así como sois alimentados por una sola despensa, así vestíos de un solo guardarropa". Les pidió poner sus medios y estructuras al servicio de la misión apostólica. En Brasil, en 2019, ocho religiosos agustinos fueron expulsados y perdieron su estado clerical por intentar apropiarse indebidamente bienes económicos gestionados por la orden. Ante los agustinos representantes de 46 países, que eligieron un nuevo prior general en la persona del padre Joseph Farrell el 9 de septiembre, el pontífice americano-peruano animó a mantener "el espíritu misionero" nacido desde "la primera misión en 1533". La congregación cuenta hoy con unos 2.300 miembros en todo el mundo.
Tras su encuentro a puerta cerrada, León XIV se prestó para una foto grupal con los agustinos en el atrio del Instituto Patrístico bajo los focos atentos de los periodistas presentes. Luego almorzó con ellos como solía hacer cuando era prefecto del dicasterio para los Obispos antes de su elección al trono petrino. El Papa León XIV había visitado previamente el Augustinianum pocos días después de su elección el 13 de mayo y regresó nuevamente el 1 de junio para compartir otro almuerzo con motivo del cumpleaños del prior general saliente del Orden.
