El cardenal José Cobo clausurará la fase diocesana en Madrid

El cardenal José Cobo clausurará la fase diocesana en Madrid

El evento, que tendrá lugar en Madrid, busca reconocer el martirio de Madre Desamparados y sus compañeras durante la guerra civil, destacando su legado en la congregación de las Esclavas de la Virgen Dolorosa.

La clausura de la fase diocesana de la causa de beatificación de Madre Desamparados y sus compañeras se celebrará en Madrid, presidida por el cardenal José Cobo, arzobispo de la ciudad. Este evento representa un momento significativo para la congregación de las Esclavas de la Virgen Dolorosa, que inició esta investigación en 2004. La madre Isabel, superiora actual, y la hermana Maite, postuladora, han desempeñado un papel crucial en este proceso que busca reconocer el martirio de estas mujeres durante la guerra civil.

María Guadalupe Serneguet y Gállego, conocida como Madre Desamparados, nació en Valencia en 1887. Su vida cambió al ingresar en las adoratrices, donde desarrolló su vocación religiosa. En 1935, fundó el Refugio Nuestra Señora del Amparo en Madrid, dedicado a ayudar a mujeres en situaciones difíciles. La espiritualidad de Madre Desamparados, influenciada por la adoración eucarística, dejó una huella profunda en su congregación.

Durante los meses previos a su martirio, Madre Desamparados enfrentó situaciones extremas pero decidió permanecer con sus compañeras y las mujeres que acogía. A pesar de los registros y detenciones, su espíritu de sacrificio y entrega se mantuvo firme. La fecha de su muerte se sitúa en noviembre de 1936, aunque no hay certeza absoluta. Su legado perdura en la congregación que fundó, ahora conocida como Esclavas de la Virgen Dolorosa.

El carisma de Madre Desamparados fue continuado por el padre Manuel Herranz y respaldado por el obispo Leopoldo Eijo y Garay. La congregación se ha adaptado a los tiempos atendiendo a madres migrantes en Madrid y manteniendo su misión original en México. La obra de Madre Desamparados sigue viva, reflejando su dedicación a las mujeres necesitadas y su compromiso con la voluntad de Dios.

Comentarios
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Eduardo Montoya
5 horas hace
La memoria de los mártires es esencial para nuestra sociedad. La clausura de la fase diocesana de Madre Desamparados en Madrid no solo rinde homenaje a su legado, sino que nos invita a actuar en favor de los más vulnerables, especialmente ante las crecientes necesidades sociales. La labor de las Esclavas de la Virgen Dolorosa debe motivarnos a cultivar una cultura de cuidado y compasión en nuestras comunidades.
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