En el Ángelus del último domingo de julio, el Papa León XIV destacó la importancia de la oración como acto de fe, subrayando que Dios siempre escucha nuestras súplicas y nos guía en momentos de dificultad.
En el Ángelus del último domingo de julio, el Papa León XIV se centró en la importancia de mantener una confianza inquebrantable en Dios. Durante su intervención, el Pontífice destacó que el Señor siempre escucha nuestras oraciones, animando a los fieles a no dejar de rezar con confianza. Subrayó que la sabiduría divina supera nuestra comprensión humana y que, aunque a veces no entendamos sus caminos, debemos seguir confiando en su plan.
El Papa León XIV recordó a los presentes que la oración es un acto de fe y esperanza. En sus palabras, enfatizó que "la oración es el puente que nos une con Dios", y que a través de ella podemos encontrar consuelo y guía en momentos de dificultad. Además, el Sumo Pontífice señaló que la perseverancia en la oración nos ayuda a fortalecer nuestra relación con Dios y a descubrir su voluntad en nuestras vidas.
Durante su alocución, el Papa León XIV también hizo referencia a las enseñanzas de Jesús sobre la oración. Citó pasajes del Evangelio para ilustrar cómo Cristo nos enseñó a dirigirnos al Padre con confianza y humildad. El Pontífice animó a los fieles a seguir el ejemplo de Jesús, recordando que "el Señor nunca nos abandona" y siempre está dispuesto a escuchar nuestras súplicas.
Para concluir su mensaje, el Papa León XIV pidió a los asistentes que se mantengan firmes en la fe y continúen rezando por un mundo más justo y pacífico. Reiteró que la oración es una herramienta poderosa para transformar corazones y sociedades, alentando a todos a ser mensajeros de paz y amor en sus comunidades.
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