Un obispo alemán ha revelado que su renuncia en 2004 se debió a un matrimonio civil, y no a problemas de salud como se informó inicialmente.
El obispo Reinhold Nann, quien lideraba la prelatura territorial de Caravelí, en Perú, ha admitido que su dimisión fue motivada por su unión civil con una mujer peruana, con quien continúa viviendo. En sus declaraciones, el prelado expresó que durante su servicio eclesiástico, "vi demasiado, y me horrorizó y deprimió". Aunque tenía la intención de abandonar su ministerio, decidió contraer matrimonio civil antes de solicitar la laicización.
El obispo Nann criticó la postura de la Iglesia respecto al celibato clerical, afirmando que su "desesperado aferrarse" a esta disciplina causa "mucho más daño que bien". Sus palabras han generado un debate sobre la vigencia y el impacto de esta norma en la vida de los religiosos.
