El Pontífice celebró su cumpleaños tras una liturgia en la basílica de San Pablo, donde recibió felicitaciones del cardenal Giovanni Battista Re y destacó la importancia del Año Jubilar para la misión evangelizadora.
Al concluir la liturgia de la conmemoración de los mártires y testigos de la fe del siglo XXI en la basílica de San Pablo, el Papa León XIV saludó a los representantes de otras Iglesias y comunidades cristianas en la Sacristía. Posteriormente, se reunió con los cardenales y otras personalidades en la Sala de la Pinacoteca. Durante este encuentro, el cardenal Giovanni Battista Re, decano del Colegio Cardenalicio, le dirigió unas palabras de felicitación por su cumpleaños.
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El Papa agradeció al cardenal Re, destacando la coincidencia de su cumpleaños con la fiesta de la Exaltación de la Cruz. Expresó: «Desde el comienzo de mi vocación, siempre he respondido: No se haga mi voluntad, sino la tuya, Señor». Además, manifestó su deseo de que el entusiasmo de los fieles en este Año Jubilar produzca frutos para la misión de anunciar el Evangelio. El Papa se mostró contento de celebrar este día con una celebración de carácter ecuménico e invitó a continuar juntos como «testigos de unidad, caridad y esperanza».
Tras un breve brindis, el corte de la tarta y el canto del «cumpleaños feliz» por los presentes, el Papa salió de la basílica. Se detuvo a saludar a la multitud congregada en el exterior antes de regresar al Vaticano.
