El obispo Arturo lideró la peregrinación de los fieles del arciprestazgo de Santa María y Miera hasta la Catedral de Santander, donde presidió una Eucaristía en el marco del Jubileo de la Esperanza 2025.
En una calurosa tarde de verano, la S.I.B. Catedral de Santander acogió a los fieles del arciprestazgo de Santa María y Miera, quienes peregrinaron hasta allí con motivo del Jubileo de la Esperanza, celebrado en 2025. La jornada comenzó en la parroquia del Santísimo Cristo, desde donde los participantes, acompañados por el obispo Arturo, caminaron hasta la catedral. Este recorrido simbolizó tanto un viaje físico como espiritual.
La celebración continuó con una Eucaristía presidida por el obispo Arturo. Durante su homilía, analizó el Evangelio de Lucas (10, 1-12.17-20), describiéndolo como un relato «precioso». En él se narra el envío de setenta y dos discípulos por Jesús para predicar el Reino. El obispo destacó la importancia de este texto para comprender que ser cristiano implica ser enviado en misión.
Los discípulos regresaron llenos de alegría por las obras realizadas en nombre de Jesús. El obispo Arturo subrayó que la misión se hace posible cuando los discípulos actúan en su nombre, afirmando que «hemos hecho cosas grandes en tu nombre». Este principio guía a los cristianos a ponerse en camino y anunciar el Reino.
El obispo también recordó que es esencial salir al mundo en nombre de Jesús, diferenciándose de aquellos que se predican a sí mismos. Animó a los presentes a confiar en su misión y dar testimonio de su fe mediante sus vidas, sembrando paz y anunciando el Reino.
Se informó además que los tres arciprestazgos restantes peregrinarán a la catedral en septiembre y octubre. Otros grupos diocesanos realizarán peregrinaciones durante los últimos meses del año, fortaleciendo así la unión entre las 64 parroquias del arciprestazgo.