El Pontífice expresó su gratitud tras el Ángelus, destacando la necesidad de detener las hostilidades y fomentar el diálogo para honrar a las víctimas de los conflictos bélicos.
Al término del Ángelus, el Papa León XIV expresó su agradecimiento a quienes promueven la paz en regiones afectadas por la guerra. En su intervención, destacó la importancia de honrar a los fallecidos en conflictos mediante el cese de hostilidades y el compromiso con las negociaciones. El Papa subrayó que, para recordar verdaderamente a las víctimas, es esencial detener el fuego y esforzarse en las conversaciones de paz.
El Santo Padre también dirigió un pensamiento a Filipinas, afectada por el tifón Fung-wong, y se unió al mensaje de la Conferencia Episcopal Italiana para el Día de Acción de Gracias. En este contexto, animó a cuidar la tierra y combatir el desperdicio de alimentos. Durante la oración mariana en la Plaza de San Pedro, el Papa recitó una lista de civiles, niños, ancianos y enfermos, poniendo de relieve el dolor de quienes sufren los efectos de los conflictos violentos.
