Enrique Benavent, arzobispo de Valencia, ha subrayado la importancia de la solidaridad y la fraternidad en el primer aniversario de la DANA, recordando a las 229 víctimas y el dolor de sus familias.
Enrique Benavent, arzobispo de Valencia, ha destacado que el primer aniversario de la DANA no debe ser solo un día de recuerdo doloroso, sino también una oportunidad para renovar la esperanza. Durante el rezo del ángelus en el Arzobispado, subrayó la importancia de la solidaridad y la fraternidad vividas en este tiempo, expresando su confianza en que Dios haya acogido a los fallecidos.
En este aniversario que recuerda la tragedia que causó la muerte de 229 personas en la diócesis, el arzobispo rememoró tanto el dolor como la solidaridad experimentados. Mencionó el sufrimiento de quienes perdieron seres queridos y bienes materiales, y que aún están reconstruyendo sus vidas. Las parroquias de las zonas afectadas celebrarán eucaristías en memoria de los difuntos.
Las banderas del Arzobispado ondean a media asta como señal de luto oficial en Valencia por las víctimas de la DANA. Monseñor Benavent concluyó el ángelus con un responso por los fallecidos, uniéndose al recuerdo de quienes perdieron la vida hace un año.
