La Iglesia rescata a las clarisas mayores de Belorado del cisma
Cuatro de las cinco religiosas mayores de Belorado pasarán la Navidad acogidas en comunidades de clarisas, tras ser rescatadas por la Guardia Civil de las cismáticas, según la Oficina del Comisario Pontificio.
Cuatro de las cinco religiosas mayores del Monasterio de Santa Clara de Belorado pasarán la Navidad en otras comunidades clarisas, tras ser rescatadas por la Guardia Civil de las exmonjas cismáticas, según informó la Oficina del Comisario Pontificio, encabezada por Mons. Mario Iceta, arzobispo de Burgos.
El pasado 18 de diciembre, la Guardia Civil intervino en el Monasterio de Orduña, donde las religiosas mayores —de entre 87 y 101 años— habían sido trasladadas por las cismáticas. Tras su rescate, recibieron atención médica; tres quedaron ingresadas en el Hospital Universitario Basurto de Bilbao “debido al gran deterioro en que se encontraban por las condiciones insalubres, precarias y deficitarias en las que vivían y que ellas mismas han manifestado”. Las otras dos fueron acogidas en monasterios pertenecientes a la Federación de Clarisas Nuestra Señora de Aránzazu.
Ayúdanos a mantener vivo este proyecto: DONA“En la tarde de hoy, dos de las tres hermanas mayores que permanecían desde el jueves en el hospital han sido dadas de alta” y también fueron trasladadas a monasterios clarisas, mientras que “sólo una hermana, que presentaba un mayor deterioro en su estado de salud, permanece ingresada”. Desde el rescate, las cismáticas intentaron acceder a las religiosas mayores al menos en dos ocasiones —el domingo 21 y el lunes 22— sin lograrlo.
No obstante, según difundió Francisco Canals, portavoz del grupo cismático, no se les ha permitido el acceso a estas religiosas que forman parte de la auténtica comunidad clarisa reconocida por la Iglesia Católica, ya que ninguna participó en el proceso cismático iniciado en mayo de 2024.
Por otra parte, la Oficina del Comisario Pontificio informó que “al hilo de la instrucción que se sigue por coacciones, trato degradante y otros delitos”, el propio Juzgado de Instrucción N.º 5 de Bilbao dictó como medida cautelar la prohibición para las ocho exreligiosas cismáticas —así como para sus abogados y procuradoras— de acercarse a las hermanas mayores.
Además, fue inadmitida a trámite la demanda presentada por las cismáticas contra Mons. Iceta y la Archidiócesis de Burgos, por supuesta vulneración de derechos fundamentales como la libertad religiosa, asociación y principio de igualdad. Un auto del Tribunal de Instancia de Briviesca fundamenta su resolución en que las asociaciones “Monasterio de Santa Clara de Belorado” y “Monasterio de Santa Clara de Derio”, utilizadas para interponer dichas demandas y presuntamente integradas por las cismáticas, “no existen legalmente y, por tanto, carecen de capacidad para otorgar poderes de representación”.
También confirmó la incapacidad legal para representar a los monasterios tanto a Dña. Laura García de Viedma —exabadesa y líder del grupo cismático— como a dichas asociaciones ficticias. Esta decisión fue ratificada previamente por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid y posteriormente por el Tribunal Supremo. Asimismo, se inadmitió su personación en los procedimientos judiciales relacionados con el desahucio del Monasterio de Derio, así como con la resolución del contrato compraventa del Monasterio de Orduña.
A día hoy, este conflicto permanece abierto y dependerá “del posible acuerdo que puedan alcanzar el Comisario Pontificio y el Monasterio de la Inmaculada de Vitoria", al cual las exreligiosas nunca llegaron a abonar lo pactado. Por último, el comunicado expresa que “el Comisario Pontificio espera que esta dolorosa situación, aún bajo competencia judicial”, pueda resolverse conforme al bien espiritual y material del monasterio y sus integrantes.
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