Cincuenta jóvenes de distintas parroquias han recorrido 55 kilómetros del Camino Olvidado de Santiago, promoviendo el interés por esta ruta menos transitada y fomentando un acercamiento espiritual al legado jacobeo.

Cincuenta jóvenes de diversas parroquias han completado un recorrido de 55 kilómetros por el Camino Olvidado de Santiago, una ruta menos transitada que ofrece una experiencia única de peregrinación. Durante el trayecto, los participantes tuvieron la oportunidad de reflexionar y compartir momentos de oración y convivencia, fortaleciendo su fe y sentido de pertenencia eclesial. Esta iniciativa busca revitalizar el interés por esta antigua senda, promoviendo un acercamiento espiritual y cultural al legado jacobeo. La experiencia ha sido valorada positivamente por los jóvenes, quienes regresan a sus hogares con renovadas energías y un profundo sentido de comunidad.

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