La exposición "Ville e Giardini di Roma: una Corona di Delizie" en Palazzo Braschi reúne cerca de doscientas obras de instituciones italianas e internacionales, explorando la evolución de los jardines históricos de Roma hasta el 12 de abril de 2026.
La muestra "Ville e Giardini di Roma: una Corona di Delizie", que tiene lugar en Palazzo Braschi hasta el 12 de abril de 2026, ofrece un recorrido detallado sobre la influencia que los jardines históricos han ejercido en la configuración urbana y cultural de Roma. Promovida por Roma Capitale - Sovrintendenza Capitolina ai Beni Culturali y organizada por Zètema Progetto Cultura, la exposición reúne cerca de doscientas obras procedentes de instituciones italianas e internacionales, entre ellas los Museos Vaticanos y la Biblioteca Apostólica Vaticana. La curaduría corre a cargo de Alberta Campitelli, Alessandro Cremona, Federica Pirani y Sandro Santolini, quienes subrayan el valor científico del proyecto.
El itinerario comienza en el Cinquecento, época en que las antiguas viñas urbanas se transformaron en residencias destinadas al ocio y la contemplación. Destacan piezas como la rara vista realizada por Joseph Heintz el Joven sobre la Villa Mattei al Celio, junto a representaciones de Villa Madama, Villa Giulia, la Farnesina y Villa Medici. Estas obras evidencian cómo los jardines han sido espacios dinámicos y en constante evolución. En el Seicento, la teatralidad se intensifica con la restauración de los acueductos, que convierten el agua en un elemento arquitectónico fundamental, tal como refleja el cuadro dedicado a Villa Borghese datado en 1625.
Durante el Settecento, Roma experimentó nuevos equilibrios estilísticos bajo influencias francesas e inglesas. En este periodo sobresale Villa Albani, celebrada tanto en las pinturas de Francesco Panini como en la obra del danés Christoffer Wilhelm Eckersberg. En el Ottocento, las revoluciones políticas y la modernización afectaron más a los jardines que a los palacios; un ejemplo notable fue la destrucción parcial de Villa Ludovisi. No obstante, este siglo también introdujo nuevas formas de disfrutar del espacio verde público, como las caminatas por el Pincio y el Gianicolo.
El Novecento supuso la profesionalización del paisajismo con figuras destacadas como Raffaele de Vico, Pietro Porcinai y Maria Teresa Parpagliolo. La exposición resalta cómo los jardines pasaron a ser espacios con responsabilidad colectiva frente a desafíos contemporáneos como el smog y el cambio climático. El catálogo editado por L’Erma di Bretschneider recuerda al jardín como símbolo tanto de memoria histórica como de esperanza para una armonía futura, reflejando una historia marcada por transformaciones sin idealizaciones.
