El cardenal y arzobispo de Madrid, José Cobo, ha reflexionado en una entrevista en Herrera en COPE sobre el momento social y político que vive España, el papel de la Iglesia ante la polarización, la polémica del Valle de los Caídos, el fenómeno del “revival” católico y los grandes retos pendientes en materia de migración y exclusión social
Un año jubilar marcado por la esperanza y el cansancio social
José Cobo hace un balance positivo del año para la Iglesia de Madrid, subrayando el carácter jubilar de 2025 y la alta participación ciudadana: más de medio millón de personas han pasado por celebraciones religiosas. No obstante, reconoce que este crecimiento convive con un clima general de cansancio, tensión social y crisis democrática, provocado por una polarización política que ha terminado trasladándose a la sociedad.
En este contexto, el cardenal defiende que la Iglesia debe ofrecer esperanza y espacios de encuentro, evitando caer en la confrontación partidista y contribuyendo a rebajar la crispación social.
El Valle de los Caídos: aclaraciones frente a la polémica
Uno de los momentos centrales de la entrevista gira en torno a la resignificación del Valle de los Caídos. Cobo aclara que el proceso ha sido impulsado, organizado y calendarizado por el Gobierno, y que la Iglesia no lo inició. Su papel se limitó a establecer un marco de actuación para proteger los bienes y elementos religiosos presentes en el recinto.
Entre las garantías logradas, destaca la permanencia de la comunidad monástica, la protección del culto y de la basílica con acceso independiente, así como el respeto a los símbolos religiosos. Una vez fijadas estas condiciones, la Iglesia dio un paso atrás y el protagonismo pasó a los monjes y a la Santa Sede. El cardenal denuncia que ciertos medios han presentado el proceso de forma ideologizada, llegando incluso al ataque personal, y defiende que un análisis sereno demuestra que lo esencial ha quedado preservado.
¿Está de moda lo católico? Más allá del efecto cultural
Ante la pregunta sobre un posible “revival” de lo católico en la cultura y entre los jóvenes, Cobo advierte de que las modas son pasajeras y que conviene no confundir fenómenos culturales con un cambio profundo. Sin embargo, sí identifica un dato relevante: una creciente sed de sentido, especialmente entre los jóvenes.
El arzobispo señala que muchas personas buscan respuestas ante el vacío existencial y que preguntas como el sentido de la vida son cada vez más frecuentes. En este escenario, la Iglesia ofrece una presencia discreta pero constante. Además, atribuye al Papa Francisco un cambio de clima social, con una relación más amable hacia lo católico tras años de agresividad cultural, lo que abre la puerta a un diálogo más sano con la sociedad.
La Asamblea Presbiteral de Madrid: verse, escucharse y fortalecerse
De cara a 2026, José Cobo anuncia la celebración en Madrid de la Asamblea Presbiteral Convivium, un encuentro que reunirá a los cerca de 1.700 sacerdotes de la diócesis. El objetivo no es solo simbólico, sino conocerse mejor, tomar el pulso al clero y fortalecer los vínculos internos.
Esta asamblea servirá además como paso previo a una gran asamblea diocesana prevista para 2027, en la que se abordarán los retos de futuro de la Iglesia madrileña.
Gaudí y una posible visita del Papa a España
Otro de los anuncios destacados de la entrevista es la posibilidad real de una visita del Papa León XIV a España con motivo del centenario de la muerte de Antonio Gaudí, recientemente declarado venerable. Cobo afirma que el viaje está sobre la mesa y que, además de Barcelona, existe una probabilidad alta de que el Papa visite también Madrid, aunque aún quedan por concretar fechas y detalles.
Migración y sinhogarismo: una deuda pendiente de las administraciones
La entrevista concluye con una reflexión crítica sobre la acogida y la integración de las personas migrantes. El cardenal se refiere al desalojo de migrantes en Badalona como la punta del iceberg de un problema más profundo: la ausencia de una ley de sinhogarismo y el bloqueo de la regularización de personas sin papeles.
Cobo denuncia la pasividad de las administraciones públicas y reclama un pacto global por las migraciones. Recuerda que muchas de estas personas trabajan en la economía doméstica sin derechos laborales y advierte de que el miedo político está impidiendo aprovechar una oportunidad social y humana, siendo siempre los más pobres quienes pagan las consecuencias.
