La procesión de la Virgen de la Merced en Barcelona fue cancelada debido a las inclemencias del tiempo, aunque se celebró una misa en la basílica presidida por Fermín Delgado con la presencia de autoridades locales.
La lluvia impidió que la imagen de la Virgen de la Merced saliera en procesión este domingo hacia la Catedral de Barcelona, como es tradición. Bajo un cielo cubierto de nubes negras, con fuertes lluvias, relámpagos y truenos, la talla gótica de la Merced permaneció en la basílica. La decisión de cancelar la procesión se tomó en el último momento. A pesar de ello, se celebró una misa en honor a la patrona de la ciudad, presidida por el rector de la basílica, Fermín Delgado, con la asistencia de autoridades como Albert Batlle, tercer teniente de alcaldía de Barcelona, y numerosos fieles.
Durante la homilía, Delgado subrayó que «la vida es breve y hay que aprovecharla para hacer feliz a los demás», destacando que esta es la verdadera riqueza que se lleva al otro mundo. También advirtió sobre el peligro de adorar a dos amos, Dios y el dinero, señalando que «el dinero es un amo tan exigente que lo quiere todo y transforma el alma». Delgado enfatizó que «la codicia es un hambre insaciable» y que el juicio divino se basará en las riquezas del alma.
Las condiciones meteorológicas también afectaron al obispo auxiliar de Barcelona, David Abadías, quien no pudo presidir la misa en la basílica y tuvo que celebrarla en la Catedral de Barcelona. En su homilía, Abadías animó a que «el corazón busque y adore al único Señor y no caiga en las tentaciones». Advirtió sobre los falsos pastores que prometen sin cumplir, afirmando que «cuando abrimos nuestro corazón al Señor, nuestra vida se ilumina y da fruto».
El próximo miércoles 24 de septiembre, la basílica de la Virgen de la Merced se vestirá de gala para celebrar la solemnidad de su patrona con una misa a las 10:30 h.