El cardenal Fernando Chomali, de origen palestino, ha ofrecido su mediación al Papa León XIV para facilitar el diálogo con Israel en un contexto de creciente tensión en Oriente Medio.
El arzobispo de Santiago, Fernando Chomali, se reunió este lunes con el Papa León XIV para manifestar su disposición a actuar como mediador en el conflicto entre Israel y Palestina. En un momento en el que el frágil alto el fuego en Gaza amenaza con romperse, Chomali, único cardenal de origen palestino, expresó su deseo de contribuir activamente a la paz en la región. "Quiero participar de manera más activa a generar vínculos de paz, vínculos de diálogo… le dije que contara conmigo como también con toda la comunidad palestina que está a favor de la paz y el término de esta guerra", afirmó el cardenal tras su encuentro con el Santo Padre.
Chomali, quien a sus 68 años participó por primera vez en un cónclave, destacó la importancia de su herencia familiar en su compromiso con la paz. "Yo le dije que era nieto de migrante, que mis cuatro abuelos eran migrantes, que para mí la situación que se vive en el Medio Oriente en general, en Gaza en particular, en todas partes, me produce mucho dolor, me produce mucha impotencia", declaró el purpurado. Asimismo, subrayó que "la inmensa mayoría de los habitantes de Tierra Santa quieren la paz, quieren vivir en paz y en un ambiente de fraternidad".
El cardenal también se refirió a la necesidad de una solución de dos Estados, alineándose con la postura diplomática tradicional de la Santa Sede. "No solamente hay que terminar con la guerra, que hay que hacerlo ya, sino generar pueblos que puedan desarrollarse con fronteras seguras", afirmó. En Chile, donde reside, hay una significativa comunidad de descendientes palestinos que sigue de cerca la situación en la región. Chomali podría liderar iniciativas para asegurar el alto el fuego en la Franja de Gaza y buscar un futuro estable para la región.
El encuentro con el Papa León XIV fue descrito por Chomali como un "gran regalo del Señor", durante el cual agradeció al Santo Padre por su exhortación apostólica "Dilexi te", destacando su profundidad espiritual y su capacidad para trazar un camino hacia la paz y la justicia.