La Virgen de la Antigua, patrona de Panamá, ha sido coronada en una ceremonia presidida por el arzobispo José Domingo Ulloa Mendieta en la Catedral Metropolitana de Panamá, fortaleciendo los lazos entre Sevilla y Panamá.
Sevilla y Panamá han sido testigos de un acontecimiento de gran relevancia para la Iglesia Católica: la solemne coronación pontificia de la Virgen de la Antigua, patrona de Panamá. Este evento, que ha unido a dos naciones en una expresión de fe compartida, se llevó a cabo en la Catedral Metropolitana de Panamá. La ceremonia fue presidida por el arzobispo José Domingo Ulloa Mendieta, quien destacó la importancia histórica y espiritual de este acto para los fieles panameños.
La coronación pontificia es un reconocimiento especial otorgado por el Papa a imágenes marianas que poseen una devoción significativa y una rica tradición histórica. En esta ocasión, el Papa León XIV concedió este honor a la Virgen de la Antigua, subrayando su papel como símbolo de unidad y esperanza para el pueblo panameño. La imagen, venerada desde hace siglos, es un vínculo espiritual entre Sevilla y Panamá, ya que su devoción se remonta a los tiempos en que ambas regiones compartían estrechos lazos culturales y religiosos.
Durante la ceremonia, el arzobispo Ulloa Mendieta expresó su gratitud al Papa León XIV por este gesto que reafirma los profundos vínculos entre las comunidades católicas de ambos países. Además, enfatizó cómo esta coronación pontificia fortalece la identidad religiosa y cultural del pueblo panameño. La celebración contó con la presencia de numerosos fieles y autoridades eclesiásticas, quienes participaron con fervor en este momento histórico.
El evento también incluyó una serie de actividades litúrgicas y culturales que resaltaron la riqueza del patrimonio religioso compartido entre Sevilla y Panamá. Estas actividades no solo celebraron la coronación en sí misma, sino que también sirvieron para profundizar en el conocimiento mutuo y fortalecer los lazos fraternos entre ambas comunidades. La coronación pontificia de la Virgen de la Antigua se convierte así en un hito significativo dentro del calendario litúrgico panameño.
Es importante destacar que esta ceremonia ha sido recibida con entusiasmo por los fieles tanto en Panamá como en Sevilla. La devoción a la Virgen de la Antigua sigue siendo un pilar fundamental para muchos creyentes, quienes ven en ella una intercesora poderosa ante Dios. Este acto solemne no solo refuerza esa devoción, sino que también invita a reflexionar sobre el papel central que María ocupa en la vida espiritual de los católicos alrededor del mundo.