El Papa León XIV ha reafirmado la doctrina tradicional de la Iglesia Católica sobre el matrimonio y ha descartado la ordenación de mujeres como diaconisas.
En una reciente entrevista concedida a la corresponsal de Crux, Elise Ann Allen, y publicada en el libro León XIV: ciudadano del mundo, misionero del siglo XXI, el Papa León XIV ha abordado varios temas de relevancia para la Iglesia Católica. Entre ellos, ha descartado la posibilidad de ordenar diaconisas y ha reafirmado la enseñanza tradicional de la Iglesia sobre el matrimonio como una unión entre un hombre y una mujer. El libro, editado por Penguin, se publica hoy en español en Perú, con ediciones en inglés y portugués previstas para principios de 2026.
El Santo Padre ha reconocido que las cuestiones relacionadas con las personas LGBTQ son altamente polarizadoras dentro de la Iglesia y ha expresado su intención de no fomentar dicha polarización. Aunque algunas personas desean cambios en la doctrina, León XIV ha subrayado que primero deben cambiar las actitudes antes de considerar cualquier modificación doctrinal. "Es muy improbable, ciertamente en un futuro cercano, que la doctrina de la Iglesia cambie en términos de lo que enseña sobre la sexualidad y el matrimonio", afirmó.
El Papa León XIV también ha reiterado que la invitación de la Iglesia es para todos, recordando las palabras de su predecesor: "Todos, todos, todos". Ha manifestado su preocupación por las iniciativas que buscan ritualizar bendiciones a parejas del mismo sexo, señalando que esto va en contra del documento Fiducia Supplicans, que permite bendecir a todas las personas pero no ritualizar dichas bendiciones.
En cuanto a las relaciones con China, León XIV ha indicado que continuará la política de la Santa Sede, manteniendo un diálogo constante para comprender mejor cómo la Iglesia puede continuar su misión. Ha mencionado los problemas políticos que afectan a los católicos chinos, quienes han enfrentado opresión y dificultades para practicar su fe libremente.
Sobre la liturgia, el Papa León XIV ha abordado el debate sobre la Misa tridentina, animando a un clima de escucha y comunión. Ha lamentado que las tensiones en torno a la liturgia se utilicen como bandera para otras disputas dentro de la Iglesia y ha señalado que la cuestión requiere un verdadero proceso de diálogo.
Por último, el Santo Padre ha reafirmado que no tiene intención de cambiar la enseñanza de la Iglesia sobre la ordenación de mujeres al diaconado, aunque ha expresado su compromiso de promover la participación de las mujeres en roles de liderazgo en la vida eclesial. Ha destacado que su elección como Papa estadounidense no implica una agenda política particular, sino una oportunidad para comprender mejor la realidad de su país de origen.