El obispo auxiliar Francisco César García Magán dirigió la celebración litúrgica en Talavera de la Reina, recordando al Papa León XIV y destacando el papel de la Virgen María en la redención.
La basílica de la patrona de Talavera de la Reina fue el escenario de la celebración de la fiesta litúrgica de Nuestra Señora del Prado el pasado 14 de septiembre. La solemne Misa fue presidida por Francisco César García Magán, obispo auxiliar y secretario general de la Conferencia Episcopal Española. Durante la ceremonia, estuvo acompañado por el rector del templo y el arcipreste de la ciudad, así como por diversas autoridades locales y miembros de la Hermandad de la Virgen del Prado.
En su homilía, García Magán recordó al Papa León XIV, quien cumplía 70 años ese mismo día, solicitando oraciones por su ministerio. El obispo destacó el papel esencial de la Virgen María en la redención, subrayando su colaboración en la historia de salvación. Citó el momento de la Anunciación como clave en esta cooperación divina y animó a los fieles a seguir el ejemplo de María en su vida diaria.
El obispo auxiliar también recomendó la lectura de la encíclica "Redemptoris Mater" de San Juan Pablo II, destacando la experiencia de María al pie de la cruz como un momento de profunda fe. En su mensaje, García Magán exhortó a los presentes a reproducir actitudes de servicialidad y amor, enfatizando que al ser testigos de María, los cristianos se vuelven más creíbles y visibles en la sociedad.