El arzobispo Gustavo García-Siller ha visitado Kerrville, Texas, para ofrecer apoyo a las víctimas de las inundaciones que han causado 82 muertes, destacando la importancia de la unidad y la colaboración en la recuperación.
El arzobispo Gustavo García-Siller ha visitado una iglesia local en Kerrville, Texas, para ofrecer su respaldo y oraciones a las víctimas de las recientes inundaciones que han devastado la región. Durante su visita, el arzobispo dirigió una oración especial por los fallecidos y sus familias, subrayando la importancia de la solidaridad y el consuelo en momentos de tragedia. Las inundaciones han dejado un saldo trágico de 82 muertos, lo que ha conmocionado a los habitantes locales.
En su intervención, el arzobispo García-Siller destacó la necesidad de unidad y colaboración entre los afectados y las autoridades locales para superar esta crisis. "En tiempos difíciles como estos, es fundamental que nos apoyemos mutuamente y trabajemos juntos para reconstruir nuestras vidas", afirmó el prelado. Además, hizo una llamada a los fieles para que continúen ofreciendo sus oraciones y apoyo a quienes han perdido a sus seres queridos.
Por otra parte, las autoridades locales continúan trabajando arduamente en las labores de rescate y recuperación en Kerrville. Equipos de emergencia han sido desplegados en toda la zona afectada para brindar asistencia a los damnificados y evaluar los daños causados por las inundaciones. La comunidad se ha movilizado para proporcionar refugio temporal, alimentos y otros recursos esenciales a quienes lo necesitan.
El impacto de las inundaciones ha sido devastador no solo en términos de pérdida de vidas humanas, sino también en daños materiales significativos. Numerosas viviendas e infraestructuras han quedado destruidas o gravemente dañadas. Las autoridades han pedido a los residentes que se mantengan informados sobre las condiciones climáticas y sigan las indicaciones de seguridad mientras continúan los esfuerzos de recuperación.
Finalmente, el arzobispo García-Siller reiteró su compromiso con la comunidad afectada y aseguró que la Iglesia seguirá brindando apoyo espiritual y material durante este difícil proceso. "Estamos aquí para caminar junto a vosotros en este camino hacia la recuperación", concluyó el arzobispo, reafirmando su dedicación al servicio pastoral en momentos de necesidad.
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