El evento destacó la importancia de la solidaridad y el respaldo a los migrantes, subrayando el papel de la Iglesia en la promoción de la justicia y la caridad hacia los más vulnerables.
La Iglesia costarricense celebró el Jubileo Nacional del Migrante, un evento en el que se hizo una llamada a la solidaridad y se rechazó la indiferencia social hacia los migrantes. Durante el acto, se subrayó la importancia de acoger y respaldar a quienes se ven obligados a dejar sus hogares en busca de mejores oportunidades. La celebración contó con la participación de diversas comunidades y fue un espacio para reflexionar sobre el papel de la Iglesia en la promoción de la justicia y la caridad hacia los más vulnerables.