La peregrinación, que se celebra anualmente en Argentina, reunió a miles de fieles en la Basílica de Luján bajo el lema “Madre danos amor para caminar con esperanza”.
La 51ª Peregrinación Juvenil a la Basílica de Luján concluyó con una Eucaristía presidida por Jorge García Cuerva, arzobispo de Buenos Aires. Este evento, que se ha convertido en una tradición en Argentina, reunió a una multitud de fieles bajo el lema “Madre danos amor para caminar con esperanza”. La celebración contó con la participación de más de una decena de obispos y sacerdotes, y el templo estuvo completamente lleno de devotos.
Durante su homilía, el arzobispo García Cuerva destacó la devoción del pueblo argentino hacia la Virgen de Luján, Patrona de Argentina. Subrayó que la Virgen impulsa a los fieles a continuar el camino con unidad y misericordia, especialmente hacia aquellos que enfrentan dificultades. Además, pidió oraciones por los abuelos, los jóvenes atrapados en vicios y las personas más vulnerables, como los pobres y los desempleados.
El arzobispo también exhortó a los presentes a no perder la esperanza en este Año Jubilar, recordando que caminar con esperanza significa no dejarse vencer por el desaliento. A pesar de las dificultades, animó a los fieles a seguir adelante, confiando en quienes los acompañan y resistiendo al egoísmo, la violencia y la injusticia. La peregrinación, que comenzó en 1975, sigue siendo una de las manifestaciones de fe más significativas en Argentina, convocando a millones de personas cada año.