Durante el Ángelus dominical, el Papa León XIV ha subrayado la importancia de la oración y la cooperación internacional para evitar tragedias como las de Hiroshima y Nagasaki, llamando a líderes y fieles a promover la paz.
En el marco del 80º aniversario de los bombardeos atómicos de Hiroshima y Nagasaki, el Papa León XIV ha dirigido un mensaje a la humanidad durante el Ángelus dominical. En su alocución, el Santo Padre ha destacado la importancia de la oración como herramienta para alcanzar la paz mundial. Ha recordado las devastadoras consecuencias de aquellos ataques y ha pedido a todos los fieles que no olviden las lecciones del pasado.
El Papa León XIV ha enfatizado que la paz no es solo un deseo, sino una responsabilidad compartida por todos. Ha animado a los líderes mundiales a trabajar juntos para evitar que se repitan tragedias similares. Además, ha solicitado a las comunidades religiosas que se unan en oración y acción para promover un mundo más justo y pacífico.
Por otra parte, el Sumo Pontífice ha destacado la necesidad de fomentar el diálogo entre naciones como medio para resolver conflictos. Ha señalado que solo a través de la cooperación internacional se podrá construir un futuro libre de violencia y guerra. En este sentido, ha instado a cada individuo a ser un artesano de paz en su entorno cotidiano.
El Papa León XIV ha concluido su intervención recordando que la paz comienza en el corazón de cada persona. Ha exhortado a todos los presentes en la Plaza de San Pedro y a quienes lo seguían por otros medios a renovar su compromiso con la paz y la reconciliación. Con estas palabras, el Santo Padre ha dejado claro que el camino hacia un mundo mejor requiere esfuerzo conjunto y constante oración.
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