El Papa León XIV recibió al presidente de Stellantis y Ferrari, John Elkann, quien le obsequió un volante de Ferrari y un coche en miniatura.
El pasado 26 de septiembre, el Papa León XIV tuvo un encuentro con John Elkann, presidente de Stellantis y Ferrari, según informó el Vaticano. Durante la reunión, Elkann entregó al Santo Padre un volante utilizado por el piloto de carreras Charles Leclerc, así como un coche en miniatura, como gesto simbólico de la colaboración y el respeto mutuo entre la industria automovilística y la Iglesia Católica.
Stellantis, conglomerado automovilístico que incluye marcas de renombre como Alfa Romeo, Chrysler, Fiat, Jeep y Maserati, busca con este tipo de encuentros fortalecer los lazos con el Vaticano y subrayar su compromiso con valores compartidos. Este gesto se enmarca en una serie de iniciativas que la compañía ha emprendido para promover la sostenibilidad y la innovación en el sector automotriz.
La visita de Elkann al Papa León XIV se produce en un contexto de creciente interés por parte de las grandes corporaciones en establecer relaciones más estrechas con instituciones religiosas, reconociendo el papel crucial que estas desempeñan en la promoción de la ética y la responsabilidad social. La entrega del volante de Ferrari simboliza no solo un regalo de cortesía, sino también un reconocimiento a la influencia del Papa León XIV en temas de relevancia global.