El obispo José Antonio Satué ha iniciado su labor pastoral en Málaga visitando el monasterio de San José y el centro gerontológico El Buen Samaritano, donde celebró la Eucaristía y compartió con los residentes.
José Antonio Satué, el nuevo obispo de Málaga, ha comenzado su ministerio visitando a la comunidad de carmelitas del monasterio de San José en Málaga. Este convento, fundado por san Juan de la Cruz, se encuentra en el barrio La Goleta y es conocido por la fabricación de formas para las iglesias de la diócesis. Además, el obispo ha visitado a los sacerdotes mayores que residen junto al obispo emérito Ramón Buxarrais.
El 17 de septiembre, José Antonio Satué también acudió al centro gerontológico El Buen Samaritano, coordinado por Cáritas. Este centro, inaugurado en 1994, acoge a personas mayores con dificultades económicas. Durante su visita, el obispo celebró la Eucaristía junto a los sacerdotes mayores y Ramón Buxarrais. En su homilía, animó a los presentes a salir de sí mismos y a encontrarse con los demás, destacando la importancia del apoyo mutuo.
Patricio Fuentes, director de El Buen Samaritano, señaló que el obispo Satué mostró gran interés por la labor de la residencia y se mostró cercano tanto con los residentes como con el personal. Tras la celebración, el obispo compartió un momento de convivencia fraterna con todos los presentes. El Buen Samaritano, situado en Churriana, es la primera residencia asistida de Málaga y ofrece servicios de residencia, centro de día y unidad de respiro familiar.