Los Superiores Mayores de la Compañía de Jesús analizan en Roma cómo integrar la administración de sus obras con el cuidado personal de cada jesuita, en un encuentro que ya alcanza su sexto día.
La Reunión de Superiores Mayores de la Compañía de Jesús, que se celebra en Roma, ha alcanzado su sexto día, caracterizándose por una atmósfera de tranquila seriedad. El tema central de este encuentro es el papel del Superior Mayor, enfocado en la integración de la Cura Apostolica y la Cura Personalis. Los Superiores Mayores enfrentan la compleja tarea de equilibrar la administración de las obras y la misión de la Compañía con el cuidado individual de cada jesuita. Este compromiso implica atender la evolución personal, espiritual y vocacional de los miembros en todas las etapas de su formación y vida.
El desafío de mantener este equilibrio no es sencillo. Requiere una presencia constante y una capacidad de escucha que trascienda la mera gestión administrativa. La Cura Apostolica se centra en la actividad apostólica y la misión más amplia de la Compañía, mientras que la Cura Personalis se dedica al cuidado personal de los jesuitas. Este enfoque dual es fundamental para el liderazgo en la Compañía de Jesús, y los Superiores Mayores trabajan para integrar ambos aspectos de manera efectiva.