El Pontífice ha expresado sus deseos de que el nuevo Gran Duque promueva valores cristianos y el bien común, extendiendo su bendición apostólica a los habitantes del Gran Ducado.
El Papa León XIV ha enviado un telegrama a Guillermo de Luxemburgo, heredero al trono del Gran Ducado, con motivo de su ascenso. En el mensaje, el Pontífice expresa sus deseos de que el nuevo Gran Duque promueva una vida basada en los valores cristianos que han moldeado la identidad de Luxemburgo y fomente la búsqueda del bien común. Además, el Papa acompaña sus palabras con sinceros deseos de paz para el futuro del país y extiende su bendición apostólica a todos los habitantes del Gran Ducado.
Guillermo de Luxemburgo, de 43 años, asumirá el trono tras la abdicación de su padre, Henri, quien reinó durante 25 años. La ceremonia de coronación y juramento de la Constitución se llevará a cabo ante los 60 miembros de la Cámara, con la presencia de la realeza de los Países Bajos y Bélgica. Durante el fin de semana, el nuevo Gran Duque realizará una gira por el país, que culminará con una misa dominical en la catedral de Notre-Dame de Luxemburgo, presidida por el cardenal Jean-Claude Hollerich, arzobispo de Luxemburgo.