El obispo Joseph Strickland afirma que fue destituido de su cargo en Tyler, Texas, por defender las enseñanzas de la Iglesia, rechazando las alegaciones de problemas administrativos o fiscales.
En una entrevista concedida al Catholic Herald, el obispo Joseph Strickland reiteró su afirmación de que fue removido de su puesto diocesano en Tyler, Texas, debido a su compromiso con la verdad, incluso cuando esta no era popular. Strickland negó las declaraciones públicas que sugerían que su destitución se debió a dificultades administrativas o fiscales dentro de la diócesis. "No había ningún problema oculto", aseguró. "La diócesis estaba en buena forma financiera".
El obispo Strickland reveló que durante una investigación sobre su liderazgo, se le instó repetidamente a "dejar de hablar en oposición a lo que está saliendo del Vaticano". Desde su forzada renuncia en 2023, Strickland ha señalado que un "número muy reducido de obispos se han acercado a mí en privado, pero muy pocos. En verdad, no he recibido mucho apoyo fraternal".
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