El Motu proprio "Coniuncta cura" otorga a la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica mayor flexibilidad en la gestión de inversiones, derogando el Rescripto de 2022 y promoviendo la colaboración institucional.
El Papa León XIV ha promulgado el Motu proprio "Coniuncta cura", que redefine la gestión de las inversiones financieras de la Santa Sede. Este documento deroga el Rescripto del 23 de agosto de 2022, que otorgaba al Instituto para las Obras de Religión (Ior) la competencia exclusiva sobre la gestión patrimonial. Ahora, la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (Apsa) utilizará la estructura del Ior, salvo que el Comité para las Inversiones decida recurrir a intermediarios financieros de otros países.
La carta apostólica del Pontífice, publicada el 6 de octubre, se alinea con la Constitución Apostólica "Praedicate Evangelium" del Papa Francisco, que establece el principio de "responsabilidad compartida" en la gestión patrimonial. Según el artículo 219 de esta Constitución, la Apsa es responsable de la administración del patrimonio de la Santa Sede, asegurando los recursos necesarios para la Curia Romana y las Iglesias particulares.
El Motu proprio, firmado el 29 de septiembre, busca consolidar las disposiciones previas y clarificar los roles de cada institución. El Rescripto abolido exigía que todas las instituciones de la Santa Sede transfirieran sus activos financieros al Ior. Sin embargo, el nuevo documento permite a la Apsa decidir sobre el uso de intermediarios financieros externos, promoviendo una colaboración más dinámica entre las instituciones.