El cardenal Augusto Paolo Lojudice ha expresado su desacuerdo con los bombardeos estadounidenses en Nigeria, argumentando que estas acciones no benefician a los cristianos y aumentan el riesgo de violencia.
Los recientes bombardeos estadounidenses en Nigeria dejaron numerosas víctimas en campamentos de grupos extremistas islámicos en el noroeste del país. Donald Trump, presidente de Estados Unidos, justificó estas acciones como una defensa de los cristianos. Sin embargo, el gobierno nigeriano, pese a aprobar los ataques, marcó distancias con la administración estadounidense y negó que exista una "masacre" en curso, al tiempo que sostuvo que las afirmaciones de Estados Unidos no reflejan la realidad sobre el terreno.
Los ataques se produjeron en la víspera de Navidad y en las primeras horas del día de Navidad. Se dirigieron contra campamentos en la foresta del Baunei, donde, según las autoridades, se preparaban atentados terroristas de gran escala. El gobierno nigeriano confirmó que los bombardeos no fueron una decisión unilateral de Estados Unidos, sino que contaron con la aprobación del presidente Bola Ahmed Tinubu. En la operación se emplearon 16 misiles de precisión lanzados desde drones.
El cardenal Augusto Paolo Lojudice criticó los bombardeos y sostuvo que no ayudan a los cristianos y que, de hecho, los exponen a un mayor peligro. A su vez, señaló que la violencia solo engendra más violencia y que resulta necesario deshabituarse de la guerra. La situación en Nigeria sigue siendo compleja: grupos como Boko Haram y el Estado Islámico de la provincia del África occidental causaron miles de muertes y desplazamientos desde 2009.
Los bombardeos estadounidenses podrían ser solo el inicio de una campaña más amplia contra los grupos extremistas islámicos en Nigeria. En ese contexto, el presidente Tinubu anunció la compra de cuatro helicópteros de ataque a Estados Unidos, una medida que incrementa la venta de armas en una de las naciones más pobres del mundo.
